1.Las líneas de seguridad son lugares mágicos de reencuentro y desencuentro. Sobre todo cuando la luz cambia de manera dramática.
2.Si alguien te pone una curita o cremita para evitar cicatrices, cuidado: podrías enamorarte. Porque ese gesto “inocente” siempre termina siendo más profundo de lo que parece.
3.Si te ama, te cargará a caballito (o a guachinche). Ya sea por una torcedura de tobillo o una noche de exceso y soyu, es su forma de demostrar amor.
4.Los amores inolvidables suelen nacer en la infancia (sí, un poco raro).Porque aparentemente un primer encuentro en la niñez lo define todo.
5.Si te ofrece compartir su paraguas, el romance está garantizado. Las gotas de lluvia y el sonido que hacen sobre la sombrilla son una forma de decir “me importas”.
6.El que te ama siempre estará dispuesto a atarte las zapatillas. Un cliché tan pequeño, pero cargado de simbolismo romántico.
7.Invitarte a comer ramen no es solo comida, es una insinuación al cuadrado. En el mundo K-Drama, esa simple frase puede cambiarlo todo.
8.Ver la primera nevada juntos es cuasi garantía de un amor duradero. Al menos en Seúl las redes de comunicación colapsan en esa fecha.
9.Los contratos de amor (o matrimonios falsos) siempre terminan en un amor real. Aunque ambos lo nieguen al principio, sabemos cómo acabará.
10.Nada dice “te amo” como escribir y borrar un mensaje de texto una y otra vez. Esa duda ansiosa y adorable es todo lo que necesitas para saber que está enamorado/a.
11.Una caída accidental y una atrapada épica del o la protagonista son el inicio del flechazo. Porque nada es más romántico que un rescate inesperado en cámara lenta.
12.El triángulo amoroso está garantizado, y elegir a la persona correcta es un drama aparte. La protagonista (generalmente es ella) siempre tendrá el dilema de su vida entre dos hombres irresistibles.
Si también amas los K-Dramas, cuéntanos: ¿qué cliché nos faltó?