¿Qué significa innovar cuando emprendes desde tu casa, con hijos que alimentar, recursos no ilimitados y una idea que apenas empieza a tomar forma? Muchas mujeres panameñas han encontrado la respuesta la en el Canal de Empresarias. El programa, que ya va por su onceava ola, no solo capacita: transforma. Hablamos con Larú Linares, gerente de emprendimiento femenino en Ciudad del Saber, sobre los aprendizajes, los desafíos y las nuevas formas de pensar el emprendimiento femenino en Panamá.

Las inscripciones para esta nueva generación están abiertas hasta el 31 de mayo. El programa busca mujeres con ideas de negocio o emprendimientos en marcha que deseen fortalecer sus proyectos con herramientas digitales, validación de modelos y mentorías especializadas. Las interesadas pueden postularse a través del sitio web de Ciudad del Saber.

El Canal de Empresarias ha cambiado con los años. Hoy se espera que los proyectos que aplican no solo estén en etapa temprana, sino que tengan un componente claro de diferenciación e innovación. “Estamos apostando por ideas poco comunes, con potencial de crecer, que no se parezcan a las que ya existen”, cuenta Linares. Y si se trata de una empresa ya consolidada, se espera que mantenga esa chispa de querer seguir evolucionando.

Actualmente, el 70% de las clases se da en formato virtual. Las participantes se inscriben a través de una plataforma y completan los módulos según su ritmo. “También procuramos que todo el contenido esté en audio, para que puedan escucharlo mientras hacen otras tareas, y que sea accesible para personas con discapacidad visual”, explica. El programa culmina con encuentros presenciales en cada provincia, donde se integran participantes y mentores, reforzando el componente comunitario.

Una red que transforma

Más que un programa de formación, el Canal ha construido una red de contactos y confianza. “El hecho de conocer a nuevas personas, de poder colaborar, cambia la forma en que las emprendedoras visualizan su negocio. Ya no lo ven solo en su calle o barriada, sino en otros espacios, incluso fuera del país”, dice Linares. Entre las que se postulan al programa se observa una narrativa más clara y competitiva, sobre todo entre las participantes que tienen más experiencia en sus campos. “A veces la diferencia está en saber contar tu historia con claridad”, explica la gerente de emprendimiento femenino.

La innovación también es cultural, artesanal, comunitaria

Una idea común es que innovar significa necesariamente crear algo tecnológico o digital. Pero no. “Tenemos la rueda de la innovación, que es una metodología que usamos para ayudar a ver con otros ojos lo que ya hacen”, comenta. Así surgen proyectos como el de Originaria, la marca Darlenys del Río, que propone vestidos que son teñidos con pigmentos naturales —cebolla, cúrcuma— y diseños precolombinos, de esta manera rescata saberes ancestrales y cuida el ambiente.

También destaca Valmar, empresa chiricana liderada por Aymeé Valdés, ingeniera en sistemas, que ganó el “Great Taste Award” 2023. El secreto: una combinación de estudios científicos, tradición familiar y sabores panameños. O Q’Cheff, de Priscila Detresno, que produce aderezos sin gluten y salsas como la Q’Beer Steak Sauce, elaborada con cebolla caramelizada y cerveza oscura.

Sara Omi, lideresa indígena, dirige una agrupación de mujeres que empacan cúrcuma y otros productos de forma colaborativa. “Innovar también es cambiar la forma en que trabajamos en comunidad”, agrega.

Canal de Empresarias busca innovación en cada emprendimiento

Entrega de certificados a la red de Mentores de Canal de Empresarias

Mentores con propósito

La red de mentores del Canal también está en crecimiento. En junio se lanzó la convocatoria del programa Master Mentor, que busca fortalecer las capacidades de quienes acompañan a las emprendedoras. “Buscamos mentores con experiencia en temas clave como ventas, estrategia, marketing, sostenibilidad. Y también les damos herramientas para acompañar con más efectividad”, dice Linares.

El programa cuenta con el apoyo de 35 especialistas locales e internacionales que colaboran en la formación de mentores.

Una nueva iniciativa de este grupo es un directorio web, en el que se podrá buscar mentores por área o provincia. De esta manera los mentores podrán seguir dando su trabajo de manera voluntaria, pero también podrán ofrecer mentorías remuneradas. Al final, el objetivo será fortalecer el ecosistema emprendedor.

Muchas mentoras de, antes fueron alumnas emprendedoras del Canal. También hay emprendedoras que regresan con sus proyectos en otra etapa o en compañía de una socia.

Una década que dejó huella

En diez años, más de 8 mil mujeres han pasado por el Canal de Empresarias. Se han generado 7,700 puestos de trabajo y se estima que las empresas lideradas por estas mujeres han aportado más de 70 millones de dólares a la economía. El programa ha ofrecido más de mil horas de mentoría y ha fortalecido su presencia en provincias como Veraguas y Chiriquí.

“El emprendimiento femenino ha encontrado más aliados. Aún hay mucho por hacer, pero las ideas están escalando. Y lo que vemos hoy, son mujeres que se atreven a pensar en grande”, concluye Larú Linares.

Canal de Empresarias busca innovación en cada emprendimiento

Larú Linares, gerente de emprendimiento femenino de Ciudad del Saber.